Contrapunto Víctor Murguía

SEV, sin maestros, preocupados por el dinero, con protestas y una UPAV achicándose

Sí es complicada la parte administrativa de la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV), pero tampoco algo imposible de conducir adecuadamente.

Sin embargo, desde el pasado gobierno no pueden asignar correctamente las plazas de los maestros, por lo que son constantes las protestas de padres de familia por la falta de profesores en las escuelas

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Este martes tocó su turno de manifestarse a padres de la comunidad de San José Tenejapa (Tepatlaxco) porque en la primaria solo tienen a 3 maestros para 180 alumnos.

También protestaron en Tlilapan porque en el jardín de niños no han tenido clases ya que, exponen, dos profesores no se han presentado.

El lunes protestaron en Ohuapan (Tlaltetela) porque también carecen de maestros.

Y seguirán las protestas -como sucede desde tiempos del ahora diputado y antes titular de la SEV, Zenyazen Escobar- porque no han podido organizar la asignación de docentes.

En el gobierno pasado y ahora, en la SEV argumentan -así se justifican ante la gobernadora Rocío Nahle- que los maestros no quieren ir a zonas alejadas y que los sindicatos intervienen para impedir los cambios a comunidades rurales, así como que protegen a comisionados.

Estas justificaciones no son válidas. Los maestros, en lo individual, no mandan ni están en posibilidades de resistirse ante una orden sobre la ubicación de sus plazas.

Y los sindicatos ya no tienen el poder de antes, cuando eran los que decidían prácticamente todos los movimientos, promociones y vetos de cambios.

Manda la SEV, pero no han sabido organizar lo referente a la asignación de plazas. Los titulares de esa secretaría estuvieron y están en otras cosas y los responsables directos no han tenido idea de cómo meter orden.

El resultado es que hay un gran número de centros escolares con falta de profesores, alumnos sin clases teniendo por lo tanto una mala preparación y padres de familias enojados y protestando por todo el estado.

Los sindicatos tienen una fuerza tan disminuida que ni siquiera han podido o querido ver el asunto del dinero de las tiendas escolares que la SEV, tras varios meses, apenas suelta a las escuelas tras tenerlo retenido varios meses.

Para el dinero la SEV sí está atenta como también se ve en el caso de la Escuela Normal Veracruzana, a la que le quitaron el control de los recursos que genera o gestiona por si misma y que solo porque advirtieron causar una revuelta se lo devolvieron.

Otras áreas de la educación, como el Colegio de Bachilleres de Veracruz también anda mal y no pueden ni arreglar un baño si no es bajo presión, como en el caso del Cobaev 62 en Veracruz.

Y la Universidad Popular Autónoma de Veracruz (UPAV) va para reducirse a su mínima expresión, luego de que hace años llegó a tener, entre estudiantes universitarios y de preparatoria, a alrededor de 70 mil alumnos.

A sus maestros, los llamados asesores solidarios, los maltratan y les quieren dar un trato indigno en cuanto a sus remuneraciones.

Está muy difícil que en Veracruz la educación mejore, luego de los seis malos años que tuvo con el peor gobernador de Veracruz.